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| Entrada al santuario del Cerro de los Ángeles. Aquí se celebró la Alerta OVNI. Cortesía de Pablo Torres y Paco Minaya. |
Creer es la clave, nos repetíamos una y otra vez el equipo de La Quinta Esfera mientras ascendíamos ladera arriba hacia el Cerro de los Ángeles (Getafe). Eran las nueve y media de la tarde del 9 de Junio. El gran día propuesto por Milenio 3 para la Alerta OVNI 2012. Poco podíamos imaginar en esos instantes lo que dentro de unas horas, atónitos, íbamos a poder contemplar con nuestros propios ojos.
Al llegar a lo alto, nos internamos dentro del complejo religioso cuyo centro es la explanada del Sagrado Corazón, un monumento que data de mediados del siglo XX y que tiene por estandarte un Cristo con los brazos abiertos que corona de forma omnipotente y majestuosa la montaña. Allí era la cita. Allí era donde los corresponsales Pablo Torres y Paco Minaya (antiguos reporteros del diario Pueblo) habían reunido a todos los amantes del Misterio para vivir una noche de ilusión. Sin embargo, los sueños se iban a resquebrajar en cuestión de segundos. De repente, una voz grave surgió de la megafonía del recinto. ‘El complejo cerrará en breves minutos’. Nos quedamos desconcertados. Quedarse allí suponía quedarse encerrado. ¿Qué estaba pasando?
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| El equipo de La Quinta Esfera minutos antes del comienzo de la Alerta OVNI. Foto: LQE. |
Según pudimos averiguar horas después, tras una conversación con el periodista Pablo Torres, los papeles estaban en regla. Los oyentes de Milenio 3 disponían de todos los permisos necesarios para acceder aquella noche a la explanada del recinto. Entonces… ¿Qué sucedió a última hora? ¿Por qué ese cambio de opinión? ¿Tal vez ufología y religión son dos conceptos destinados a no entenderse?
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| Y los milenarios fueron llegando... Cortesía de Pablo Torres y Paco Minaya. |
Aún así, la Alerta OVNI en la zona sur de Madrid no se suspendió y siguió adelante. A partir de las 12:30 de la noche decenas de personas empezaron a copar los aledaños del complejo religioso. Jóvenes, personas mayores y padres con hijos pequeños decidieron, a pesar de los problemas, quedarse ahí y aguantar el tiempo necesario con una única esperanza: ver algo extraño en los cielos. Y os podemos asegurar que aquello que controla el fenómeno OVNI, si es que hay algo que lo domina, no permaneció indiferente ante aquellas personas. Aquella noche no. La recompensa a la fe y a la paciencia de quienes aguantaron hasta el final iba a llegar de un momento a otro.
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| La gente fue llegando paulatinamente... Cortesía de Pablo Torres y Paco Minaya. |
Eran las 4:00 de la madrugada cuando varios de los presentes señalaron al cielo y alzaron la voz para indicar que algo extraño se estaba moviendo allá arriba en dirección norte sur. Una luz que, según nos relataba emocionada Carolina, testigo presencial del avistamiento, había hecho acto de presencia súbitamente. La misma que vieron los compañeros de Cáceres al mando del corresponsal Gonzalo Pérez Sarró minutos más tarde y que Iker Jiménez relataba a través de las ondas. Una luz que hacía movimientos muy extraños, en zig-zag; que subía, bajaba y que no parpadeaba, por lo que en opinión de la testigo no podía tratarse de un medio de transporte convencional. Las sorpresas, sin embargo, no habían hecho más que comenzar.
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| Algunos llevaron el material necesario para vigilar los cielos con más precisión. Cortesía de Pablo Torres y Paco Minaya. |
Unos minutos más tarde, mientras varios avisos de avistamientos llegaban a la Cúpula del Milenio en Valladolid desde diversas partes de España; en el Cerro de los Ángeles se pudo apreciar un flashazo muy potente y cercano que nos llamó sobremanera la atención. Este destello, como nos relataba Isabel, otra testigo, y que nosotros también pudimos contemplar, fue acompañado de dos luminarias en formación paralela que surcaban el cielo a la misma velocidad y que segundos más tarde se separaron para desaparecer de nuestra vista. Por si esto fuera poco, pasadas las cuatro y media una esfera de luz, que iba a gran velocidad rumbo este sureste, se adentró en el campo visual de la Luna, que estaba en cuarto menguante, para tan solo diez minutos después volver a aparecer otro foco a gran velocidad, como si saliese de ella en dirección noreste. ¿Tal vez se trataba de la misma esfera?
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| En esta fotografía se puede ver un extraño objeto cerca de la Luna. El OVNI que entró y volvió a salir a los pocos minutos. Cortesía de Pablo Torres y Paco Minaya. |
Llegadas las 5:00 de la madrugada, justo cuando Iker Jiménez se despedía de todos nosotros a través de las ondas, poco a poco las personas que habían acudido al Cerro de los Ángeles se fueron dispersando. Nosotros quisimos permanecer allí durante unas horas. Teníamos la esperanza de ver algo más y decidimos esperar prácticamente escondidos en la ladera a espaldas del Cristo que domina el Cerro para reflexionar sobre todo lo que habíamos visto a lo largo de la noche.
Estábamos compartiendo todas estas emociones cuando de repente nos quedamos paralizados, sin habla.
Eran las cinco y media de la madrugada cuando una potente esfera de luz se paseó literalmente, a gran velocidad, por delante de nuestros ojos. De trayectoria horizontal, su velocidad nos recordó al de una estrella fugaz, aunque más lenta, ya que no se extinguió sino que su recorrido se hizo patente durante varios segundos. Como si quisiera ser vista. Aquello desde luego nos dejó maravillados y fue el broche final a una noche distinta en la que nos sentimos muy pequeños, pero especiales ante la inmensidad del cosmos.
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| El equipo de La Quinta Esfera se despide del Cerro de los Ángeles. Ya estaba amaneciendo. Foto: LQE. |
No sabemos en definitiva lo que mueve al fenómeno OVNI, ni qué son ni que quieren, en el caso de que estén comandados por una inteligencia superior, pero lo que sí que podemos contar es lo que hemos visto con nuestros propios ojos. No sabemos si con una explicación lógica o sin ella, pero algo tan real como nosotros mismos.
‘Creer es la clave’. Ahora sentimos esas palabras más profundamente. Creer, en medio de un mundo difícil, que todo es posible. Volver a ser niños por una noche, como decía Enrique de Vicente, director de la revista Año Cero, en las ondas de Milenio 3 hace unas semanas. ¿Hay algo malo en ello?
Gracias al equipo de Milenio 3 por organizar esta Alerta OVNI. Desde La Quinta Esfera nos llevamos un recuerdo muy positivo; y una de la causas más imporantes, además de las experiencias relatadas anteriormente es la gran unión que sentimos entre todas las personas que estábamos allí. Personas a las que no conocíamos, pero a las que nos unía un sueño y una creencia difíciles de explicar.
También queremos agradecer y mandar un saludo muy especial a todos los que nos han atendido de forma tan amable y desinteresada en la noche del 9J. Una noche 'cualquiera', como diría el bueno de Antonio José Alés, en la que algo extraño se dejó ver entre las estrellas.
